A partir del mes de marzo del pasado año, cuando aparecieron los primeros casos en el país del Coronavirus, las autoridades de Salud se vieron en la necesidad de habilitar el proyecto habitacional “Aguayo”, para tratar los tantos contaminados.
Previo a esa decisión, fueron habilitadas salas especializadas en el hospital San Vicente de Paúl y Centros Médicos Privados, de manera muy especial en el Centro Médico Siglo 21, cuyo cuerpo médico y administrativo se jugó la faja para salvar muchas vidas de francomacorisanos.
Estas salas no fueron suficientes, por cuya razón fue necesaria la inauguración del Centro de Aislamiento de Güiza, y en estos momentos acaba de habilitarse el hospital Doctor Federico Lavandier, conocido como el hospital del Seguro Social.
La iniciativa de los máximos funcionarios del Ministerio de Salud en la Región Nordeste, doctores Rafael de Jesús Rodríguez y Luis Rosario Socías, se hizo realidad a favor de quienes caen con el contagio de la pandemia.
Recomendamos a estos funcionarios también ser diligentes en la búsqueda de la terminación de los trabajos de construcción del Hospital de Especialidades Médicas del Nordeste, que significaría un verdadero desahogo para los servicios médicos de la Región Nordeste.
Esperamos respuestas, pero creíbles y positivas.
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