La muerte a tiros de dos mujeres en el municipio de Villa Tapia y el envío a la Justicia del sospechoso del doble crimen, compromete al Ministerio Público a profundizar las investigaciones para que el hecho, que causó consternación en toda la región, no quede impune.
Con el sometimiento a la justicia de Belarminio Antonio Polanco Toribio, quien mantenía una relación con Leticia Nazaret Liriano Ortiz y a quien la ocuparon el celular de la hoy occisa, la Policía pone una «papa caliente» en manos del Ministerio Público, debido a la ausencia de pruebas contundentes, hasta el momento, que puedan lograr una condena, pese a los esfuerzos desplegados en ese sentido por la policía, al mando del general Miguel Raúl de la Cruz Reyna, quien desde el primer momento se mostró interesado en esclarecer todo lo acontecido.
Los informes obtenidos establecen que Polanco Toribio llamó cerca de las 10:30 de la noche a un joven contable que era compañero de estudios de Liriano Ortiz, en la Universidad Católica Nordestana, donde la hoy occisa cursaba el noveno semestre de medicina, preguntándole la razón porque su número estaba en el móvil de la citada joven y repitió la llamada un par de veces, siendo la última vez alrededor de las 11:00 de la noche del 8 del cursante mes.
De acuerdo a esos informes extraoficiales, dos menores que lograron escapar tras la muerte de Liriano Ortiz y Danielba Margarita Ortiz Santana, identificaron un carro rojo de donde habría salido el autor del doble crimen ocurrido en la casa marcada con el 53 de la calle Duarte y posteriormente la Policía ocupó al profesor sospechoso del hecho de sangre un carro color rojo vino marca Toyota.
Sin embargo el arma homicida no ha sido localizada y los proyectiles y estrías de una pistola calibre 9 milímetros ocupada al sospechoso, tampoco coincide con la pistola utilizada para matar las dos mujeres y herir al niño de tres años Diego Miguel Santana Ortiz.
Solo las conjeturas y suposiciones acompañan la acusación, el expediente que deberá ser completado por el Ministerio Público de Salcedo, en uno de sus mayores retos que es localizar el arma homicida y buscar las pruebas que incriminen al presunto autor del doble crimen ocurrido en el apacible municipio de Villa Tapia.