La tarde del jueves 19 de mayo de 1965, buscando recuperar el Palacio Nacional, fue abatido el Coronel Rafael Thomas Fernández Domínguez y cayeron en combates, ilio Capocci, Euclides Morillo, Ramón Tavárez, José Jiménez y el doctor Juan Miguel Román.
Que cayera Fernández Domínguez en ese fallido intento de retomar la Casa de Gobierno, para la Revolución Constitucionalista del 24 de abril de 1965, constituyó uno de los reveses más importantes.
Un revés importante, porque el coronel Fernández Domínguez fue el mentor de ese proyecto militar para devolver al país su vida constitucional y que volviera al poder el profesor Juan Bosch, quien había sido víctima de un golpe de estado.
En el día de hoy se cumplen 57 años de ese doloroso hecho, que pintó de gris el firmamento e hizo derramar “lágrimas de rabia y de compromisos de liberación” al líder de la Revolución, coronel Francisco Alberto Caamaño Deñó y otros militares constitucionalistas.
A principio de la mañana en el parque Duarte, se dieron por convocados los dirigentes de las fundaciones Caamaño y Fernández Domínguez, para depositar una ofrenda floral y resaltar el heroísmo de liberación de los caídos, que el pueblo dominicano guarda para ellos deudas de gratitud.
Loor eterno para esos héroes y mártires, que fueron ejemplo de liberación de los pueblos del mundo.
