Hay países que tienen programas sociales especiales para atender a los sectores menos favorecidos, como es el caso de República Dominicana y su tarjeta de Solidaridad, con el que las personas que tienen menos recursos disponen de la posibilidad de recibir un beneficio económico que les ayude a solventar su precaria situación.
Hay sectores de la población que no pueden mantener ni siquiera su propia alimentación por una amplia cantidad razones. Por tal razón, los gobiernos siempre buscan maneras efectivas de protegerlos con algunos beneficios y subsidios especiales.
Así lo hace República Dominicana, a través de la Administradora de Subsidios Sociales (ADESS), institución que entrega una serie de ayudas económicas a sus ciudadanos, para que puedan soportar la situación que atraviesan.
Este organismo ofrece sus servicios de asistencia social a través de su tarjeta Solidaridad. El plan del Gobierno dominicano es reducir la pobreza extrema y ayudar a quienes necesiten superar su mala situación de forma progresiva, con todo el apoyo de una amplia red de protección social.
Pedir los correspondientes servicios es muy fácil, solamente debes solicitar aquí tu tarjeta Solidaridad y cumplir con los requisitos exigidos para calificar y recibir la ayuda económica. Ahora, incluso, los trámites se pueden realizar desde Internet para agilizar las gestiones.
La tarjeta es una herramienta financiera que identifica a su portador como inscrito en las instituciones de protección social del Gobierno. Es una tarjeta electrónica de débito intransferible, que permite hacer consumos en los lugares afiliados y autorizados.
En ella se pueden cargar diversas asignaciones del plan de asistencia social de forma simultánea, entre ellos: Comer es Primero, Protección a la Vejez en Extrema Pobreza, incentivos a la Educación Superior y a la Asistencia Escolar, y Bonogas para Hogares.
Estos servicios son una gran ventaja a favor de los sectores más desfavorecidos.
¿Cómo funciona?
La tarjeta Solidaridad tiene por propósito ser un apoyo a las familias más vulnerables que no cuentan con los ingresos suficientes para poder mantenerse. Cuando se cuenta con este recurso, cada miembro del núcleo familiar recibe una ayuda social para cubrir parte de sus necesidades.
El bono mensual que aporta la tarjeta Solidaridad, actualmente, es de 825 pesos, y siempre varía de acuerdo al precio que tenga la canasta base específica. Esta cantidad ayuda a que la familia pueda disponer de los alimentos esenciales y pueda ir saliendo progresivamente de la situación en la que se encuentre.
Requisitos para solicitarla
Los requisitos que se exigen no son muchos, pero sí esenciales. A continuación se mencionan:
- Primeramente, por ser un beneficio de República Dominicana, se debe tener la correspondiente nacionalidad.
- Ser mayor de edad.
- El carnet electoral y la cédula de identificación nacional tienen que estar al día.
- Se debe estar realmente en situación de pobreza extrema demostrable para poder optar a este beneficio.
- El jefe de familia que vaya a solicitar el servicio debe estar debidamente registrado en ADESS.
Para solicitarla, la persona interesada debe trasladarse hasta las oficinas de ADESS y explicar en una carta la condición económica en la que se encuentra, tratando de presentar todos los medios probatorios posibles. Los funcionarios de la institución recibirán la solicitud, harán el estudio debido, para luego decidir si realmente el solicitante necesita dicho apoyo.
De aprobarse la ayuda económica, ADESS envía la tarjeta al beneficiario lo antes posible, para que comience a cobrar de inmediato y pueda empezar a subsanar la situación económica que pueda estar atravesando.
Si pasa algún tiempo y el organismo no emite ninguna respuesta, el solicitante puede llamar a los números especificados en la página oficial de ADESS y solicitar la información correspondiente.
Esta ayuda es un apoyo muy importante para quienes, lamentablemente, no pueden mantener por su cuenta a sus familias. Es un subsidio del Estado dominicano que tiene por propósito brindar un respaldo económico fijo a quienes lo necesiten, para que avancen y puedan, progresivamente, estar en mejor posición.
