Las estadísticas de la Policía y de la Procuraduría General de la República, revelan cada año que el narcotráfico en el país origina el mayor número de muertos, por la lucha sin cuartel del control de venta de drogas y otras sustancias controladas por la Ley número 50-88.
El citado récord en los últimos años está siendo amenazado por los fatales accidentes de tránsito y el ascendente número de muertos a consecuencia de cáncer y paros cardiacos.
Las mismas autoridades del Instituto Nacional de Tránsito y Transporte Terrestre (INTRANT), confirman que el 73% de los fallecidos en accidentes de tránsito en distintos puntos del país son de motoristas, la mayoría con edades que oscilan entre 15 y 30 años de vida.
Lo grave de esa trágica situación, es que no se observa a corta o larga distancia medidas o programas, que puedan aplicarse en calles, avenidas y carreteras, para limitar a menores de edad el uso de motocicletas, hasta de altos cilindrajes.
En manos de las autoridades del INTRANT y la Dirección General de Seguridad de Tránsito Terrestre (DIGESETT), descansa la responsabilidad de parar la carnicería humana, que se manifiesta a diario en el sistema vial de la República Dominicana.