La presencia del matrimonio Obama en un partido amistoso de baloncesto se convirtió ayer, de la noche al día, en un debate público que llevó a la Casa Blanca a negar que la primera dama rechazara un beso de su esposo y presidente de EEUU, Barack Obama.
“Les puedo decir, basado en una muy buena fuente, que las informaciones que (apuntan que) el presidente fue rechazado son falsas”, subrayó el portavoz adjunto de la Casa Blanca, Josh Earnest, a los periodistas que viajaron en el Air Force One a Texas con Obama, quien estuvo ayer haciendo campaña en ese estado.
Quien desencadenó tales informaciones fue la “Kiss Cam” (Cámara del amor), un juego en los partidos de baloncesto en EEUU que reta a las parejas a besarse cuando aparecen pincha- das en las pantallas gigantes de los estadios.
La “Kiss Cam” del Verizon Center de Washington, donde la selección estadounidense se enfrentó a la brasileña para calentar motores para los Juegos Olímpicos, enfocó la noche de este lunes en dos ocasiones al matrimonio Obama.
En la primera ocasión, algunos de los presentes comentaron que la primera dama le dijo “no” con la cabeza.