El Partido de la Liberación Dominicana a consecuencia de los desprendimientos de diputados, síndicos y dirigentes de sus organismos de dirección, para guarecerse a las sombras del Partido la Fuerza del Pueblo y del oficialista Partido Revolucionario Moderno, es situado en el ámbito electoral en un tercer lugar.
Esa llamada Medalla de Bronce colocada en el pecho del PLD por reconocidos politólogos y empresas de encuestas, pudo ser “superada” el pasado sábado en la capital dominicana, con la entusiasta marcha morada, que encabezó su candidato presidencial Abel Martínez.
Aunque la asistencia fue de sus dirigentes y simpatizantes de todo el territorio nacional e internacional, el Partido de la Liberación Dominicana se quedó bien lejos de superar las marchas del Movimiento “Marchas Verdes”.
Es difícil, pero no imposible, que el partido de la estrella amarilla, que fundara el profesor Juan Bosch en el 1973 para terminar la obra de liberación, que dejara incompleta el patricio Juan Pablo Duarte, pueda volver a liderar al pueblo votante en las venideras elecciones del 2024.
Hay quienes tienen el “atrevimiento” de poner en duda esa posibilidad, razón de que el PLD salió muy mal parado del poder en el año 2000, visto el presunto enriquecimiento ilícito de sus principales Ministros y hermanos del ex presidente licenciado Danilo Medina.
Pero dicen que en el mundo político todo puede suceder.
