Respuestas correctas
El profesor pregunta a los estudiantes:
– Haber, dígame usted, ¿qué es lo más rápido que existe?
-El rayo, profesor.
-Muy bien.
-¿Y para usted, qué es lo más rápido?
-La luz, maestro.
– Muy bien, -responde el profesor.
¿Y para tí Jaimito, qué es lo más rápido que puede haber?
-Bueno profe, la otra noche yo me tiré de la cama como un rayo, encendí la luz y cuando vine a ver, taba’ to’ cagao…
Cortito
Dos ladrones estaban robando en una casa y de repente uno cambió de idea y arrestó al otro.
Insólito!
Una mujer metió las cenizas de su esposo cuando él murió, dentro de un contador de tiempo en forma de huevo para que de esta manera él pudiera ayudarla en la cocina.
Preguntas
¿En qué se parecen los hombres a las gallinas? -En que siempre están acomodándose los huevos.
En el cuartel policial
-Comandante, el preso se escapó!
-¿Cómo que se escapó? ¿Yo le dije que vigilara la puerta?
-Sí mi general, pero se escapó por la ventana!
Mendigo sabio
Un señor pide en la calle:
-Una limosna, por favor que soy ciego.
-¡Pero, hombre, si el otro día era usted sordomudo!
-Ya ve usted, señor, yo salgo de una desgracia para entrar en otra.
Hipólito y Pepito
En los días que Hipólito Mejía era el presidente de la República, visitó una escuela pública; en el pasillo se encuentra con Pepito y le dice:
-Ah, tú eres Pepito el de los cuentos?
-No, el de los cuentos es usted, yo soy el de los chistes.
No es lo mismo, no es igual
No es lo mismo ver dos pelotas negras, que dos negras en pelota.
No es lo mismo decir la tormenta se avecina, que la vecina se atormenta; tampoco es lo mismo decir la verdura, que verla dura