La inteligencia emocional en cualquier persona en especial en un profesional de cualquier área del conocimiento es de vital importancia y en estos momento más, ya que se están observando muchas conductas y situaciones que son muy preocupantes en la sociedad actual. Un profesional de la enseñanza en cualquier área del conocimiento necesita ser un buen orador, conversador y orientador, ya que de sus habilidades y competencias de la comunicación oral o escrita depende en gran parte la eficacia de su acción en el espacio donde les toque realizar su trabajo. El dominio de la comunicación oral es una necesidad ineludible del profesional.
El desarrollo de las competencias comunicativa, crítica, dialógica, lingüística e intelectual son necesaria para que el profesional se exprese oralmente con eficacia ante un grupo que está formado por las habilidades que influyen, entre otras estrategias que debe implementar en el proceso, así se analiza el contexto de comunicación para adecuar el discurso a cada situación.
Si bien es cierto que muchas profesiones requieren de una buena comunicación oral y escrita, como ejemplo los docentes, médicos, abogados, arquitecto…otros es especialmente significativo constatar que la acción de construir un buen discurso oral o escrito para que puedan transmitir los contenidos, ideas y sentimientos y así relacionarse con los sujetos con el fin de favorecer y evaluar cada accionar que realiza o los aprendizajes; ya que eso es vital en cada profesional, ir evaluando sus tareas propuestas como profesional.
Las habilidades comunicativas tienen un lugar muy importante en el innovador concepto de inteligencia emocional, desarrollado por Gardner y Goleman, ellos las consideraron determinantes tanto para el desarrollo personal como para la relación social. Ellos hablan de ocho inteligencia múltiples y cuatro tienen relación directa con las habilidades comunicativas, una de ellas recibe el nombre de inteligencia lingüística, la cual aparece definida al final del artículo, aunque todas son necesarias para el buen manejo del discurso.
Sin duda las habilidades son componentes imprescindibles de ciertos perfiles profesionales en lo que el discurso oral y la relación con los demás, juegan un papel decisivo en la consecución de los objetivos que se haya planteado. También, en cualquier discurso, el profesional transmite información sobre sí mismo como persona y como profesional, información que, por extensión transmite parte de la imagen de la institución para la cual trabaja.
Hay que tener en cuenta, que el discurso del profesional de cualquier área, tiene que constituir siempre un modelo para los sujetos que lo escuchan, no solo el conocimiento que tenga y el buen uso de la lengua, sino de las habilidades comunicativas en un sentido amplio, porque eso incluye las actitudes implicadas en la relación con los grupos y con el entorno social en sentido general.
Enunció las inteligencias relacionadas con las habilidades comunicativas antes mencionadas para que los lectores hagan memoria de ellas: inteligencia intrapersonal, inteligencia interpersonal, inteligencia corporal, y la inteligencia lingüística, la cual voy a definir pues es la capacidad de usar las palabras de manera efectiva, en forma oral o escrita. Incluye la fluidez verbal y el dominio de la sintaxis, la fonética, la semántica y los usos pragmáticos del lenguaje, recursos de explicación y uso de metalenguaje o metalingüística. Es la que se destaca en los buenos redactores y oradores, son los que utilizan ambos hemisferios cerebrales.
Gracias por leer, pues es la que da la capacidad de producir.