A punto de cumplirse la segunda semana de docencia, los estudiantes de la Escuela Padre Brea aún están a la espera de iniciar su año escolar debido a la no conclusión de los trabajos de remozamiento del plantel.
El centro educativo cuenta actualmente con una matrícula de más de 600 estudiantes que permanecen en sus hogares, lo cual representa un riesgo de deserción escolar.
La directora Carolina Santana explicó que recientemente, junto con la directora distrital 07-05 de Educación, Berenice Castellanos, visitaron al arquitecto Lork Kevin Jerez, director administrativo de infraestructura y mantenimiento escolar del MINERD. Jerez informó que el retraso se debe a que la Contraloría General de la República no ha liberado los fondos al contratista de la obra para culminar el remozamiento.
En declaraciones para EL JAYA, Santana señaló que, hasta la fecha, los contratistas han realizado solo reparaciones menores. Sin embargo, problemas en las áreas del sistema eléctrico, cloacal y pluvial han retrasado la entrega del edificio escolar.
Se anunció la reparación de la escuela el 23 de enero de este año con la expectativa de entrega para antes del 15 de agosto; sin embargo, la obra sigue inconclusa debido a procesos administrativos.
«En principio, el presupuesto está entre 30 y 32 millones de pesos, pero podría aumentar dada la realidad que presenta la escuela, que fue construida en 1952», dijo la directora del centro.
Preocupaciones
Santana expresó gran preocupación por el retraso en la apertura del centro educativo. El mismo tiene capacidad para 720 estudiantes, pero la matrícula se ha reducido a unos 600. La tardanza en iniciar la docencia podría provocar deserción escolar entre los estudiantes.
Además, la reducción de la matrícula genera incertidumbre en el equipo docente, ya que podría llevar al traslado de profesores a otros centros escolares.