Los Gobiernos de los Estados Unidos han aceptado heridas profundas al sistema democrático de la República Dominicana, destacándose las criminales e inhumanas invasiones militares de 1916 y 1965.
También el auspiciar junto a funcionarios de la CÍA, militares reaccionarios, la cúpula de la Iglesia y remanentes de la tiranía trujillista, el golpe de estado al gobierno del PRD y del profesor Juan Bosch.
El derrocamiento de Bosch el miércoles 25 de 1963, significó también una grave herida al sistema democrático nacional, porque tras ella se alzó a las escarpadas montañas de Quisqueya, el líder guerrillero Manolo Tavàrez Justo y los jóvenes del 1J4, en su mayoría asesinados por los militares golpistas.
También una grave herida al sistema democrático nacional, porque motivó a los coroneles Rafael Thomas Fernández Domínguez y Francisco Alberto Caamaño Deñó, liderar la Revolución Constitucionalista del 24 de abril de 1965, convertida en Guerra Patria, al originarse la intervención militar de los Estados Unidos a solo 4 dìas de sus inicios.
A 60 años del golpe de estado al gobierno del profesor Bosch, nos inscribimos entre quiénes se preguntan y con mucha razón, cuál hubiera sido el porvenir del pueblo dominicano si Bosch y su equipo de funcionarios haber tenido la oportunidad de ejecutar por 4 años su proyecto de gobierno.
Maldecimos y seguiremos maldiciendo a los protagonistas de herir de gravedad al sistema democrático nacional un día como hoy en el año 1963.