La Universidad de Indiana informó el miércoles dos de noviembre el fallecimiento de Bobby Knight, el icónico entrenador de baloncesto que dejó una marca indeleble en el deporte universitario de los Estados Unidos. A la edad de 83 años, Knight deja tras de sí un legado de triunfos y controversias que marcaron su paso tanto en las canchas como fuera de ellas.
Con una carrera que abarcó más de cuatro décadas, Knight alcanzó el pináculo del baloncesto universitario al conquistar tres campeonatos de la NCAA con Indiana en 1976, 1981 y 1987. Acumuló un total de 902 victorias entre sus períodos en Army, Indiana y Texas Tech, una cifra que lo colocó como el entrenador con más triunfos al momento de su retiro en 2008.
El logro más destacado de su carrera fue liderar a los Hoosiers de Indiana a una temporada perfecta en 1976, con un registro de 32-0, hazaña que ningún equipo ha podido igualar hasta la fecha.
Knight también brilló como jugador, siendo parte del equipo de Ohio State que se alzó con el título en 1960, y posteriormente como entrenador, guiando al equipo de Estados Unidos a la medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Los Ángeles en 1984, con una victoria final sobre España.
Sin embargo, su trayectoria no estuvo exenta de controversias debido a su temperamento explosivo y autoritario. Knight fue una figura polarizante, conocida por sus enfrentamientos con oponentes, árbitros y sus propios jugadores, creando un ambiente que muchos consideraban tóxico dentro del vestuario.
Bobby Knight será recordado como una leyenda del baloncesto universitario, un entrenador que dejó una huella imborrable en la historia del deporte, tanto por sus impresionantes logros como por las pasiones que despertó.