Tal y como se esperaba, la velocista Marileidy Paulino fue recibida por el pueblo dominicano, como una verdadera heroína, al convertirse la pasada semana en la primera mujer dominicana en obtener una Medalla de Oro en unos Juegos Olímpicos.
Además de Marileidy, también fueron recibidos los atletas de la disciplina de boxeo, Cristian Pinales y Yunior Alcántara, quienes se alzaron con medallas de bronce allá en los Juegos Olímpicos, que tuvieron como sede la ciudad de París, Francia.
En medio del merecido recibimiento, abrigamos la esperanza que el Presidente de la República, licenciado Luis Abinader, honre su palabra de que los atletas que obtuvieran medallas en esos Juegos, recibirán millones de pesos y otras facilidades económicas.
Con lo que dijo ayer Marileidy al ser recibida como una heroína, se alzó con otra medalla, porque cuando cualquier ciudadano de esta tierra de Duarte, Luperón y Caamaño echa a un lado cualquier vicisitudes de su diario trajinar y se detiene a expresar su sentir, su idiosincrasia y su legítimo orgullo de ser dominicano, es para guardarle un lugar especial en la historia de este país.
Abrazamos la esperanza que gobierno invierta una mayor cuota económica en los clubes, ligas y otras entidades, que viven haciendo deportes a “manos pelá”, para que en los próximos Juegos Olímpicos otros atletas dominicanos hagan sonar el glorioso Himno Nacional, como lo hizo Marileidy Paulino.