Los sacerdotes que integran la Diócesis de la Vega han hecho suyas las luchas libran campesinos de comunidades de la población de Cotuí, que han sido desalojados de sus predios por agentes policiales, en atención a una decisión de la empresa minera “Barrick Gold”.
Hoy tambien su suman a esa postura de defensa del campesinado de Cotuí, los religiosos que integran la Diócesis de la provincia de Santiago, en la persona del sacerdote Juan Abreu, quien es el encargado de Medio Ambiente.
Abreu, “sin pelos en la lengua”, llama al pueblo dominicano a levantarse contra las empresas extranjeras que destruyen nuestros bosques, porque al parecer, el oro y otros minerales que extraen de nuestras lomas, es más importante que el agua, que termina siendo fuente de vida.
El Gobierno de Luis Abinader está llamado a dar respuestas a las Diócesis de la Vega y Santiago, mucho más porque ya los grupos que integran el Movimiento Popular francomacorisano conjuntamente con la Diócesis de San Francisco de Macorís, acaban de agendar protestas, entre ellas una marcha regional el domingo 8 de junio.
La concepción minera que abraza la Barrick Gold y otras 25 que provienen de los gobiernos del doctor Leonel Fernández, deben ser revisada, porque tal como afirmó en una ocasión monseñor Jesús María De Jesús Moya, una loma que es destruida en busca de minerales, jamás las manos del ser humano podrá reponerla.
