Ha sido criterio casi unánime, entre los asistentes que han repletado las salas de cine que exhiben el más reciente eslabón de la cadena Batman, de que esta entrega El Caballero de la Noche Asciende, ha superado a las demás en dramatismo, contenido y espectacularidad, mostrando una trama creíble y un impactante montaje y repleto de sorprendentes efectos especiales.
Christopher Noolan, director, guionista y productor de la cinta, sitúa a Bruce Wayne , rico empresario que asume a Batman,( Christian Bale) en un retiro forzoso, tras responsabilizarse por la muerte del fiscal Dent, lo que aparentemente lleva paz a Ciudad Gótica.
Pero todo cambia cuando entran en acción siniestros personajes como el villano Bane,( Tom Hardy) inteligente y despiadado, con todo un ejército de energúmenos a su disposición; una Selina Kayle, exquisita ladrona, felina y estafadora, que de Gatubela pasa ahora a mujer fatal, de imprevisibles consecuencias.
Dos nuevos personajes emergen en este filme, dándole interesantes matices y vertientes que lo hacen más atractivo: Miranda Tate,(Marion Cotillard) una rica filántropa de inesperadas iniciativas y Jhon Blake,(Joseph Gordon – Levitt) joven oficial de policía con gran valor e integridad. El conocido Michael Caine vuelve a interpretar a Alfred, el leal mayordomo de Wayne y lo hace con gracia y desparpajo.
Podemos decir que la nueva película de Batman rompe esquemas dentro de su línea y contenido, tornándose muy atractiva.