El toletero Juan Francisco acaba de firmar un contrato para jugar en el Béisbol Japonés, en lo que representa el antes y el después en su carrera.
Francisco firmó con los Gigantes de Yomiuri, por un año y 1.7 millones de dólares, según un twitter publicado esta mañana por Licey.com
Pero vamos al génesis con la carrera de Juan Francisco, firmado por los Rojos de Cincinnati, fue seleccionado por los Gigantes del Cibao en el Draft de Novatos del 2007, en vez de ser escogido por las Estrellas Orientales, que cedieron su escogencia en compensación por haber firmado a Arturo de Freites como dirigente.
Francisco inició a todo tren con los Potros, pero en una liga donde no existe la agencia libre y los equipos son amos y señores de los jugadores, comenzó a mostrar su inconformidad por entender que recibía muy bajo salario con el conjunto cibaeño.
En julio del 2011 fue transferido a los Tigres por Carlos Peguero, Robinson Díaz y Jhonny Núñez, además de dinero, pues los Potros comenzaban a mostrar problemas económicos.
Criticado sobremanera, el tiempo le dio la razón al Gerente General Pablo Peguero, quien vio en Carlos Peguero un jugador con tanto potencial como Francisco; después de los problemas judiciales en los que se involucró su esposa, el hombre se convirtió al evangelio, fue vital en el primer campeonato de los Gigantes del Cibao, sobretodo con su cuadrangular bestial en el sexto juego de la Serie Final, que puso el evento 4-2 a favor de los Potros.
Los logros principales de Francisco, tras los pasos de Mendy López como máximo jonronero de LIDOM, han sido el cuadrangular contra los Gigantes en el juego de desempate en el Round Robín hace dos años, clave para el título 21 de Licey y sus dos jonrones descomunales por los 411 del Estadio Quisqueya Juan Marichal, considerando que junto a Manny Ramírez son los dos jugadores más caros de LIDOM.
Después de tres cortas temporadas con los Rojos, los equipos de las Mayores comenzaron a impacientarse con el, en el 2012 pasó a Atlanta, en el 2013 a Milwaukee; en la primavera del 2014 fue despedido por los Cerveceros, pasó a Toronto, en el receso firmado por los Red Sox, despedido, firmado por Tampa hasta el día de hoy.
Sus registros en las Mayores han sido muy pobres, .236 promedio de bateo, su mejor año ha sido el 2013, 385 turnos, 18 jonrones, 48 remolcadas; pudo haber sido un jugador de 30 jonrones, con buenos contratos, pero la inmadurez e indisciplina, estuvieron por encima de su talento, en un negocio tan exigente como las Grandes Ligas.
Francisco, con casi 28 años, ya no es el jugador con un futuro promisorio, tendrá una segunda oportunidad, ganará buen dinero, posiblemente no juegue o se integre tarde al Licey, quizás se adapte a Japón, como lo ha hecho un jugador muy similar a el, Wily Mo Peña.
Definitivamente la vida es veleidosa, Mientras Carlos Peguero, después de rebasar los problemas legales de su esposa, tener un gran invierno y un magnífico entrenamiento, está a nivel de Grandes Ligas, Francisco hace sus maletas para partir al Lejano Oriente.