Gran indignación causó entre personas que observaron a decenas de ancianos enfermos, ex empleados del Ayuntamiento Municipal que fueron llevados en sillas de ruedas la mañana del jueves 7 de mayo, al cabildo para ser evaluados y optar por una irrisoria pensión.
Los ancianos, muchos de ellos con problemas serios de salud e invalidez, fueron evaluados por empleados del departamento de Recursos Humanos, que dirige la profesora Carmen Rosario (China), en la Biblioteca Municipal.
Por la estrechez del lugar, los ex –empleados municipales, debido a sus condiciones de salud, en sillas de ruedas esperan turnos en las aceras del entorno de la biblioteca, debajo de un sol ardiente y un calor infernal.
Muchas personas que transitaban por el lugar, mostraron indignación e impotencia, indicando que esos ancianos, por su situación de salud, debieron ser evaluados en su propia casa para que sus familiares no tuvieran que trasladarlos en esas condiciones.