Nueva York.- La ola de violencia que azota esta ciudad, al igual que otras ciudades del vecino estado de Nueva Jersey, ha dejado como consecuencia, en lo que va del presente mes, varios dominicanos muertos a tiros y otros tantos heridos, sin que se tenga conocimiento de los criollos que han sido víctimas con armas blancas, accidente de tránsito y otros hechos trágicos.
En esta Metrópoli, según informe policiales, van cerca de 130 muertos y más de 450 heridos con armas de fuegos y blancas durante los cinco meses que han transcurrido de 2015. Los arrestos por el porte de revólveres y pistola semiautomática en los trenes han aumentado un 42%, y el Comisionado de la Policía de la ciudad, William Bratton, ha dicho que la violencia con armas de fuego se ha concentrado en el Alto Manhattan, en el centro de El Bronx y el norte de Brooklyn.
Las estadísticas que maneja la alcaldía muestran un incremento del 12% en los asesinatos en lo que va del año, comparado con el mismo periodo de 2014, mientras que los incidentes de disparos han aumentado un 7%.
Los dominicanos que han fallecidos en La Gran Manzana y Nueva Jersey en este mes de mayo son Ángel César, un dominicano de 20 años asesinado de dos tiros cuando se encontraba en la parte trasera de una escuela en la avenida Creston con la calle 193, del sector Kingsbridge en El Bronx.
El menor de 14 años, Christopher Durán, muerto de varios disparos cuando iba su escuela en El Bronx. El hecho ocurrió frente al edificio 1174 de la avenida Sheridan, en el sector Morrisania.
En Hackensack, New Jersey, la policía de allí mató de varios disparos al dominicano Elvin Díaz, de 24 años. El hecho ocurrió en la residencia de Díaz, situada en el 10 de la avenida Temple.
El criollo José Cabrera, ultimado mientras estaba sentado en el porche de su casa en la calle 19 Este en el Quinto Distrito de la ciudad. El crimen sucedió en la intersección de la avenida Park y la calle 19, en el bajo Manhattan.
En el Alto Manhattan fueron asesinados a tiros los quisqueyanos Ernesto Santiago y Luis Rodríguez, de 33 y 31 años de edad respectivamente. El caso ocurrió en la discoteca Tette, ubicada en la avenida Post con la calle 207.
La criolla Patricia Dolores Hiciano Vargas, de 37 años, fue asesinada por el también dominicano Sandro Vargas en Newark, Nueva Jersey.
Francisca Fernández, una madre que vino desde República Dominicana a visitar sus hijos, murió al resbalar por las escalaeras cuando descendía del sexto piso del edificio 221 en la avenida Sherman con la calle 207, en el Alto Manhattan. Al resbalar, rompió el cristal de la ventana y cayó al vacío.
Mientras que los heridos son Sabina Montero, una madre dominicana de 49 años, baleada en la calle 181 en El Bronx mientras caminaba a su iglesia, cuando de repente comenzó un tiroteo frente a un proyecto de viviendas y una bala la impactó.
El taxista criollo, Nelson Cruz, de 52 años, que labora para una base de taxis en Brooklyn, recibió un balazo en la cabeza y dos en el tórax durante un fuego cruzado originado por dos afroamericanos en la avenida Garvey Blvd. con Bedford-Stuyvesant.
Juan Sierra (Papa), un dominicano, de 67 años, que salía de un supermercado donde acababa de realizar una compra, fue alcanzado por varios disparos, al quedar atrapado en medio de una balacera ocurrida en la avenida West Burnside con la avenida Davidson, en el sector de University Heights en El Bronx. Asimismo, Lorima Blanco, de 26 años, también resultó herida de un balazo en los glúteos.
Tres criollos, Anthony Polanco y Carlos Doñé, ambos de 24 años de edad, y otro de 23, cuya identidad no ha sido ofrecida por las autoridades, fueron heridos a tiros en la avenida Post con la calle 207, en el Alto Manhattan. La policía arrestó al afroamericano Kyle Sone, de 23 años, como principal sospechoso.
El Comisionado de la Policía de esta ciudad, William Bratton, dijo recientemente que la violencia con armas de fuego se ha concentrado en el Alto Manhattan, en el centro de El Bronx y el norte de Brooklyn, por lo que planea ubicar más uniformados en las calles.
Informes extraoficiales dan cuenta que otros dominicanos han sido víctimas, en el transcurso de este mes, con cuchillos, navajas y otros objetos cortantes-punzantes los cuales no han salido a la luz pública.