SFM– La inversión económica necesaria para la educación es la única garantía para un mejor país, a través de la cual se establezcan las cimientes para su desarrollo, consideró la egresada con mayor índice académico de la Sexagésima Segunda Graduación Ordinaria celebrada este sábado por la Universidad Católica Nordestana (UCNE).
Sheila Angélica Espinal Rodríguez, egresada Summa Cun Laude, de la Facultad de Ciencias de la Salud (Medicina), al pronunciar el discurso de gracias a nombre de los nuevos profesionales forjados por la UCNE, abogó por una profunda metamorfosis de nuestra sociedad.
“Todos somos responsables de la metamorfosis de la sociedad; exigir soluciones es parte de nuestro deber, pero también es compromiso nuestro fundamental, la posición positiva hacia el orden público, asumiendo responsabilidades con la familia, con la escuela y la comunidad”, precisó.
La hoy doctora en medicina expuso que debemos ser capaces de identificar nuestros errores y ser autodidactas en dirección de nuestro propio cambio.
Espinal Rodríguez, mostró preocupación por los niveles alarmantes de la inseguridad ciudadana, exponiendo que hoy en día caminamos en las calles temerosos, donde nadie se atreve a vivir sin cerrojos, sin cadenas, ni barrotes, constituyéndonos en presos de las circunstancias de un país pobre, mal dirigido, mal alimentado, deficientemente educado e inmerso en males aberrantes como el tráfico y consumo de estupefacientes.
“El cuadro luce escalofriante y tiende a volvernos cada vez más temerosos del joven que camina a nuestro lado en las calles, pues hemos heredado un sistema carcomido por el apetito de poder y riquezas, en un pueblo hambriento de justicia”, señaló.
Reconoció que hace falta muchas transformaciones para mitigar el desorden, pero si se parte de lo fundamental, la primera institución a reformar es la familia, como base primaria de todo ser humano, donde el niño aprende a distinguir entre el bien y el mal, conocer los valores con el ejemplo, resguardado bajo las alas de protección paternal.
A seguidas agregó que eso es lo ideal, preguntándose que cuántas familias disfuncionales existen en nuestras comunidades, expandiéndose como pólvora niños huérfanos de disciplina y de amor, padres despreocupados, encarcelados o ausente.
Destacó otro punto vital en la formación del niño la escuela, abogando por más calidad y mejor inversión estatal para la educación.
Citó que somos el eco de una problemático trazada en 1990, en Jomtien, Tailandia, donde representantes de casi todos los países del mundo suscribieron la “Declaración Mundial sobre la Educación para todos”, con el fin de cumplir con el compromiso establecido en la “Declaración Universal de los Derechos Humanos”, de que toda persona tiene derecho a la educación.