El periodista y locutor Miguel Güichardo narró para EL JAYA el secuestro y atraco del que fue víctima junto a sus familiares cuando regresaban del Aeropuerto Internacional Cibao de Santiago la madrugada del martes 14 de mayo.
«El pasado martes a las dos de la mañana fuimos víctima de un secuestro y atraco cuando veníamos de recoger a mi madre y mi hermano del aeropuerto de Santiago y en compañía de mis hijos Wanda y Luis Miguel».
Agregó que «cuatro desconocidos nos dejaron abandonados en una finca que produce arroz, nos robaron 6,000 dólares, 7,500 pesos, las tres maletas, las residencias de mi madre y mi hermano, 7 celulares, todo cuanto pudieron llevarse y nos hicieron disparos a los pies para reducirnos a la obediencia».
Afirmó que el hecho ocurrió cuando regresaban de Santiago a San Francisco de Macorís y justo en la entrada del Pino, La Vega les mandaron a detener.
Sostuvo que «los atracadore iban en una jeepeta color rojo vino y tenían la centella encendida, utilizando una radio que les servía de micrófono para mandarnos a detener y de inmediato nos obligaron a subir al vehículo en que andaban. Nos trasladaron a una finca sembrada de arroz con intenciones de matarnos».
«Gracias a Dios nos dejaron con vida cuando me identifique como miembro del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Prensa (SNTP) y le mostré que el vehículo era de un alto dirigente del Partido de la Liberación Dominicana (PLD)».
Explicó que al vehículo en que regresaba junto a sus familiares le desconectaron parte de la cablería y forzaron la llave con la intención de dañar el chip. «Para no cansarle el cuento, cuando llegamos al lugar donde dejaron nuestro vehículo abandonado ya la policía se lo había llevado y mi pregunta es la siguiente: ¿quién le informó a la policía que el vehículo estaba en esa finca; cuando solo rastreando o volando en avioneta o helicóptero podían encontrarlo? Mi conclusión es que los delincuentes son miembros de la DNCD, el J2 y la policía que en combinación con ex policías y la complicidad con oficiales de alto rango le permiten realizar varios atracos por mes y durante mayo se reportaron tres».
«Cuando fui a la policía de La Vega me hicieron pagar 6,000 pesos a una grúa y arreglando el vehículo más los viajes que he dado entre otros llevo 20 mil pesos gastados a parte de todo lo que los miembros de las instituciones castrenses nos robaron», afirmó.
Güichardo dijo que para ejecutar esta acción delincuencial utilizaron 3 pistolas y un revolver.
«Espero que el jefe de la policía aprese todos los miembros de la banda para que la paz retorne a los hogares de las 10 familias que han sido atracadas y donde algunos han perdido la vida en mano de esta banda que sale del mismo aeropuerto y que tiene su modus operandi desde el aeropuerto hasta el puente de Ranchito, los delincuentes están entre los cuarteles de Santiago, La Vega y Bonao».
«El presidente debe pronunciarse si es que los jefes de la banda y los oficiales cómplices no tienen tanto poder», concluyó Güichardo.
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