El presidente de la Asociación de Constructores de la provincia Duarte (ACOPRODU) enumeró las dificultades que afectan a ese sector las cuales han impedido que en los años 2017 y 2018 se haya alcanzado la meta de construir 1,200 viviendas.
El Ing. Aví Hidalgo Espinal explicó que “en la actualidad la falta de transparencia en el concejo de regidores del ayuntamiento de San Francisco de Macorís, las imposiciones de nuevas normas del departamento de Planeamiento Urbano, la ineficiencia de Obras Públicas y de los demás actores que intervienen en el proceso de aprobación de planos, el sector construcción ha sufrido una baja considerable en los proyectos de viviendas”.
Dijo que “a esto se une la falta de personal en el departamento de Registro de títulos y la lentitud en el sector financiero que entendemos debe ser más ágil en el proceso de financiamiento y que flexibilice los requisitos de financiación para viviendas de bajo costo, para que cada dominicano pueda adquirir su vivienda sin tantas dificultades”.
Hidalgo Espinal afirmó que “todo esto más la crisis económica, ha sumido al sector construcción en un proceso de involución si lo comparamos con otros años”. Explicó que de acuerdo a las investigaciones que ha realizado la asociación, el déficit de viviendas de bajo costo en San Francisco de Macorís oscila entre 8,750 y 10 mil unidades.
En otro orden, Hidalgo Espinal dijo que en San Francisco de Macorís la mano de obra haitiana que interviene en la construcción ronda del 20 al 25 por ciento, en razón de que los ingenieros y constructores han decidido contratar la menor cantidad de obreros de esa nacionalidad y los que contratan es porque los dominicanos no ocupan esos puestos de trabajo. Calculó que aquí se cumple en un 75% la norma del 80-20.
Sostuvo que “es un mito cuando se dice que los haitianos trabajan construcción porque es mano de obra barata, pues ellos cobran el mismo salario que el dominicano. El obrero haitiano mayormente es quien ocupa los puestos de menor categoría debido a la falta de interés de los dominicanos para realizar esos trabajos y los puestos de mayor categoría son ocupados en un 100% por los dominicanos, entiendase: plomería, electricidad, ventanas, herreria, ebanistería, carpintería, colocación de pisos, pintura y trabajos en sheetrock