
El deseo y el gusto por la lectura son determinantes para formar buenos lectores, por lo mismo nuestros salones de clases deben estar ambientados con materiales escritos y colores adecuados que faciliten en los alumnos la inmersión en el
mundo letrado, esto no significa saturar los salones de cualquier escritura, mas bien todo debe estar pensado directamente en sus aprendizajes, es por eso que se nos recomienda rotular los objetos de nuestros salones, para que de esa forma los niños estén en permanente lectura relacionando el objeto con la palabra, ya que leer no se refiere al proceso de decodificación sino al reconocimiento de la estructura de las palabras como producto de la asociación con un objetivo, estimulando a si el aprendizaje de la lectura.
Transformar nuestros salones de clases en espacios donde los niños estén en contacto permanente con la lectura es nuestra mejor decisión, debemos estar siempre en la mejor disposición de colaborar para despertar en los niños la ilusión y el interés por la lectura, si queremos podemos hacer de nuestras aulas un entorno pedagógico favorable para el aprendizaje de la lectura, donde siempre sean lugares de encuentro entre uno y otros, espacios acogedores, lugares vivos con personalidad propia, para socializar, compartir ideas y espacios donde se puedan expresar, atendiendo a las múltiples inteligencias, educar para la diversidad.
Una escuela con éxitos es aquella que consigue el objetivo irrenunciable de dotar a su alumnado de los conocimientos y de las competencias esenciales y que es capaz al mismo tiempo de ofrecerles el cultivo de las actitudes y de los valores que favorecen su formación integral, Por ello es de vital importancia siempre tener aula letrada, que fomente la creatividad y la construcción de conocimientos a través de la permanente observación de la correcta escritura de las palabras, salones letrados deben ser prioridades para poder lograr la alfabetización inicial, ya que esta importante decisión va a aportar grandemente en los saberes de los estudiantes y a si vamos a despertar el interés y el entusiasmo de los alumnos por cada día obtener nuevos aprendizajes.
La autora es Licda. En Educación Mención Ciencias Sociales, Especialista En Educación para la Diversidad, Maestra del Centro Educativo Manuel Joaquín Cruz.