Respetar las diferencias, ya sean de raza, cultura, religión, capacidades, gustos, ritmos y estilos de aprendizajes, genero, o discapacidades, no solamente es importante sino que prepara a las personas para ser solidarias y tolerantes ante los demás , esto así por que respetar lo distinto es como conocer el valor que tiene cada ser humano.
El respeto a las diferencias debemos cultivarlo tanto en el hogar como en las escuelas ya que es imprescindibles que niños, jóvenes y adultos aceptemos a las personas tal cual son y reconozcamos el valor de cada una de ellas, estableciendo de igual manera un trato amable y cortés en todos los contextos, hacerlo de esta manera propiciará en el ambiente áulico el fomento de la enseñanza y el aprendizaje. Vivimos en una sociedad con alta escala de diversidad y como tal debemos entender que todas las personas somos distintas, si somos capaces de ver esta diferencias tendremos más facilidad a la hora de adaptarnos a nuestro entorno y en el caso de nuestros alumnos les facilitará su integración y favorecerá su competencia social.
La sociedad cada vez es más diversas, debido a esto nuestros niños están más expuestos a convivir con personas de distintas formas de vida, las creencias, las costumbres, los valores y los comportamientos ponen a prueba la tolerancia y la empatía de los seres humanos, por eso es muy importante enseñarles a nuestros niños desde muy pequeños a respetar las diferencias y a verla como un gran tesoro del cual podemos aprender.
Los malos entendidos los conflictos ideológicos y los enfrentamientos muchas veces se dan por la ausencia de respeto hacia el otro, para evitar situaciones como estas, es necesario motivar y enseñar a los niños el valor de respetar a todas las personas por igual sin importar su condición o su forma de ser , si queremos que nuestros pequeños respeten las diferencias, padres y maestros debemos ser los primeros en dar ejemplo de vida, respetando a los demás ya que vivimos en un mundo donde abundan las riquezas culturales y sociales las cuales deberíamos conocerlas y aceptarlas para aprender de lo diferente, discriminar y evadir al otro solamente hace que nos perdamos del maravilloso tesoro que hay en cada persona.
La autora es Licda. En Educación Mención Ciencias Sociales, Especialista En Educación para la Diversidad, Maestra del Centro Educativo Manuel Joaquín Cruz.