El actual Director Provincial de Salud, el doctor Luis Rosario Socías, está en franca violación de la Constitución de la República Dominicana, en su artículo 49, numeral 1 y 2 así como también el decreto presidencial 504-20, en su artículo 2, numeral 4.
El doctor Rosario ha anunciado que los miembros de la presa que están trasmitiendo todos los días en vivo el recorrido que la Policía Nacional está realizando en las urbanizaciones, en los barrios y las carreteras de San Francisco de Macorís, desde el día de hoy, caerán presos, porque, son una especie de chivatos que avisan a los dueños de negocios y que al mismo tiempo, están entorpeciendo el trabajo de las autoridades políciales y de salud, en esta ardua tarea de prevenir el Covid-19, que tanto a afectado al país, pero de manera muy especial a los que vivimos en esta porción del cibao, llamada Provincia Duarte, pero pienso que está equivocado.
Por esio mi querido amigo Socías, me tomo la confianza de darle un consejo, para evitar conflictos innecesarios y que se vea empañada su buena gestión, y a lo mejor sus sanas intenciones. Porque si bien es cierto que usted es una autoridad importante dentro del sector salud en la provincia, no menos cierto es que, el cargo desempeñado por usted no le da el poder y mucho menos el derecho, de coartar la libertad de expresión, anunciando, por una disposición muy personal, que el miembro de la prensa que salga a realizar su trabajo, va a caer preso.
Sin usted proponérselo mi querido amigo Rosario, violentar los derechos individuales, la libertad de expresión y de circulación de los miembros de la prensa, consagrados en la Constitución Dominicana, es un grave error.
Doctor Luis Rosario, lejos de ver a los que graban los incidentes ocurridos durante los operativos de la policía durante el toque de queda, como sus enemigos, trátelos como sus aliados, mírelos como garantes de los derechos ciudadanos, garantes de que no se cometan abusos o excesos contra personas inocentes, que por alguna urgencia circulan durante la cuarentena, en los horarios no permitidos, uselos como testigos de primer orden ante cualquier incidente que se produzca en las calles, que sean sus ojos y su voz, ante su ausencia en los recorridos, por sus ocupaciones.
Los que ejercen el periodismo y la comunicación en sentido general (Eso incluye las redes sociales), son el cuarto poder y el verdadero sustento de la democracia en un pais verdaderamente libre.
Mi apreciado amigo Socías, el trabajo de estos jóvenes es sagrado y el ejercicio de su oficio está consagrado en la Constitución de la República Dominicana, que en su última modificación, la del 14 de junio del año 2015, es muy clara, con relación a la libertad de expresión e información.
Desde este rincón en el que informamos diariamente, llamado «Tocando El Fondo», dejo aquí para usted, mi exquisito galeno, para su conocimiento y acervo cultural, el contenido del artículo 49 de la constitución que regula lo siguiente:
Artículo 49.- Libertad de expresión e información.
Toda persona tiene derecho a expresar libremente sus pensamientos, ideas y opiniones, por cualquier medio, sin que pueda establecerse censura previa. 1) Toda persona tiene derecho a la información. Este derecho comprende buscar, investigar, recibir y difundir información de todo tipo, de carácter público, por cualquier medio, canal o vía, conforme lo determinan la Constitución y la ley; 2) Todos los medios de información tienen libre acceso a las fuentes noticiosas oficiales y privadas de interés público, de conformidad con la ley.
Cómo Director de la Provincial de Salud, usted debe ser garante de lo emanado de la máxima autoridad de la nación y respetar lo establecido en un decreto de su presidente, (que por cierto), es quien lo nombra en la posición que ostenta hoy día, y me refiero al líder y presidente de su partido y de todos los dominicanos, el Licenciado Luis Abinader, que mediante el último decreto, el No. 684-20 referente al Estado de Emergencia y que rige las reglas del toque de queda, el cual dice lo siguiente:
PÁRRAFO l. Se ratifican y mantienen vigentes las siguientes excepciones al toque de queda establecido mediante el decreto número. 504-20. En consecuencia, se permitirá que durante el horario del toque de queda circulen las siguientes personas:
4) Miembros de la prensa y demás medios de comunicación debidamente acreditados.
Entonces mi querido médico, eso debe respetarse (Incluyéndolo a usted primero y más que a nadie) porque como servidor público que es, tiene el deber de facilitar el trabajo de los medios de comunicación, porque constituye una violación flagrante, querer por la intimidación o por vía de la coerción, que la prensa francomacorisana se vea obligada a dejar de trasmitir en vivo los operativos.
Pienso en lo más profundo de mi conciencia, doctor Luis Rosario, que la mejor y mayor labor y la que por la naturaleza de sus funciones en el área de salud le competen, es la de trabajar para tratar de frenar el rebrote de Covid-19 que hay en esta provincia, de acuerdo a los datos del mismo Ministerio de Salud.
Ya la época de la intimidación, instaurada como una práctica consuetudinaria de la dictadura de Trujillo pasó, ya la persecución política de los 12 años de Balaguer también pasaron. Así como también los 20 funestos años de dictadura mediática implementada por el PLD, para enriquecer y dejar que solo tracendiera la opinión de su cártel, secuestrando la verdad, pagando y comparando a los dueños de medios, a los periodistas y comunicadores, también pasaron. Ya no es tiempo de amenazas, estamos grandecitos para que venga a comernos el cuco, estamos más bien en los tiempos de la concertación, producto del diálogo y la colaboración entre hermanos, en tiempos de pandemia.
Por último a la Policía Nacional que haga cumplir lo que dice la constitución y el decreto presidencial, que haga su trabajo, a los médicos que preserven nuestra salud y deje que la prensa y los medios de comunicación los vigilen, como garantes de la libertad, los derechos de los ciudadanos y el de todas las partes inmersas en la lucha contra el coronavirus, que es nuestro verdadero y único enemigo.
Todos somos aliados en la batalla para superar la muerte y la destrucción de nuestras familias y preservar la salud y ser tolerantes en tiempos de pandemia.
El autor es Abogado y periodista.