El seis de noviembre se conmemoró en el país el 178 aniversario de la promulgación de la primera Constitución o Carta Magna. En ella están contenidos los derechos y deberes de todos los ciudadanos dominicanos.
Por la importancia de la Constitución más que dedicar un día, bien pudiera el Tribunal Constitucional conseguir establecer por ley que se celebre el mes de noviembre u otro mes completo para educar al pueblo mediante charlas, talleres, debates, foros y cursillos con respecto al contenido de la Carta Magna. Su significado es tan trascendente que se le llama ley de leyes, porque ninguna ley, ni decreto están por encima de la Constitución.
De la misma manera que el presidente del Tribunal Constitucional, Dr. Milton Ray Guevara, vino este año a San Francisco de Macorís a la conmemoración del aniversario e impartió una conferencia, de igual forma personal entrenado por ese alto tribunal puede llevar acciones educativas a todo el territorio nacional.
Como estatuto político la Constitución dispone de los mecanismos que garantizan que el Estado asegure que los ciudadanos disfruten de los derechos humanos. Los derechos humanos son inherentes a los seres humanos, sin distinción alguna de nacionalidad, lugar de residencia, sexo, origen étnico, color, religión y lengua.
Su importancia y utilidad derivan del hecho que ella da cuenta a un conjunto de principios, valores y reglas sobre el modo de ser y de querer ser de una sociedad.
En su estructura, la Constitución dominicana consta de un preámbulo y 17 títulos que se dividen en capítulos y secciones y comprenden 277 artículos y 20 disposiciones transitorias.
Países como República Dominicana que han adoptado el sistema político democrático o republicano.
Es decir que realizan elecciones libres y delegan la autoridad en los funcionarios electos, son los que disfrutan de mayor amplitud de todas las libertades y una manera de continuar garantizándolas es mediante la educación de la ciudadanía de la importancia de promover y proteger nuestra Carta Magna.