La aplicación de la facturación electrónica en la República Dominicana es una realidad, y la ley da plazos para que los diferentes contribuyentes nacionales se acojan a la misma hasta el 2026. La implementación inició como plan piloto en el 2020, y la Ley No. 32-23 de Facturación Electrónica, promulgada el 16 de mayo de 2023, viene a instaurar y regular el sistema fiscal de facturación electrónica en el país.
Hasta el momento, unos 915 contribuyentes son emisores de factura electrónica, los cuales han emitido más de 288 millones de comprobantes fiscales electrónicos y 1,874 están en proceso de certificación, afirmó Luis Valdez Veras, director de la Dirección General de Impuestos Internos (DGII). Detalló que de esos, 334 contribuyentes utilizan el facturador gratuito y 39 son proveedores certificados.
La Dirección General de Impuestos Internos (DGII) otorgará un plazo de 120 días a los grandes contribuyentes nacionales que hayan presentado dificultades en su proceso de adaptación para la facturación electrónica. Una vez vencido el plazo de implementación o de prórroga, las personas que no hayan completado el proceso de certificación para ser emisores electrónicos incurrirán en infracciones tributarias sujetas a las sanciones previstas en la ley, las cuales pueden conllevar al arresto.
Más de 8,000 empresas y personas jurídicas están incluidas en el segundo listado de las empresas obligadas a implementar la facturación electrónica para mayo del año 2025, según publicó la Dirección General de Impuestos Internos (DGII). Esta nueva modalidad de facturación les generará conectividad, eficiencia, información en línea, reducción de costos y eliminación de errores.
Beneficios de la Facturación Electrónica
Mayor Transparencia y Control: La trazabilidad y el registro automatizado de las facturas electrónicas proporcionan a las autoridades fiscales una visión más transparente de las operaciones de las empresas, facilitando la detección de posibles irregularidades y el combate a la evasión fiscal.
Reducción de Costos: La eliminación del papeleo y la automatización de procesos reduce significativamente los costos asociados a la gestión tradicional de facturas, incluyendo gastos de impresión, almacenamiento y envío.
Mayor Seguridad y Confiabilidad: La implementación de firmas digitales y mecanismos de seguridad robustos garantiza la autenticidad e integridad de las facturas electrónicas, previniendo la falsificación y el fraude.
Agilización de Procesos: La automatización del proceso de facturación permite a las empresas emitir y recibir facturas de manera más rápida y eficiente, reduciendo los tiempos de procesamiento y mejorando el flujo de caja.
Es importante saber que existen 11 tipos de comprobantes fiscales electrónicos, cada uno con una función específica y es necesario tenerlos en consideración.
Recomendaciones para Aprovechar al Máximo la Facturación Electrónica
- Seleccionar un Proveedor Certificado: Es fundamental elegir un PSFE confiable y con experiencia que garantice la seguridad y el cumplimiento de las normativas fiscales.
- Capacitar al Personal: Es importante que el personal involucrado en el proceso de facturación esté familiarizado con el uso de la plataforma y comprenda los requisitos fiscales establecidos por la DGII.
- Implementar Políticas Claras: Establecer políticas y procedimientos claros para la emisión, recepción, almacenamiento y conservación de las facturas electrónicas, asegurando el cumplimiento de las normativas fiscales y la protección de la información sensible.
- Monitorear y Analizar Datos Fiscales: Realizar un seguimiento regular de los datos fiscales generados a través de la facturación electrónica para identificar oportunidades de mejora en la gestión financiera y el cumplimiento fiscal.
Conclusión
El sistema de facturación electrónica se ha convertido en una herramienta indispensable para las empresas dominicanas que buscan optimizar su cumplimiento fiscal, mejorar la eficiencia de sus operaciones y reducir costos. Al adoptar este sistema y aprovechar al máximo sus beneficios, los contadores pueden jugar un rol fundamental en el éxito financiero de las empresas y contribuir a la transparencia y el desarrollo económico del país.