El licenciado Fausto Rodríguez Psicólogo clínico, terapia familiar y de parejas, entrenamiento en manejo conductual, explora los principios de la paternidad responsable y aprende a crear un fuerte apego emocional con tu hijo, asegurando su bienestar y desarrollo integral.
Un día te levantas con la realidad de que eres padre. La celebración del momento no impide que tengas emociones encontradas, desde el miedo hasta la alegría, pero tranquilo que todo esto es parte de una paternidad responsable por el nuevo rol que comienza a ser parte de tu vida y que te acompañará hasta el final de tus días. Ahora tienes dos alternativas para responder a esas emociones que sientes e intentar cada día marcar en lo positivo o en lo negativo a ese ser que ha llegado a ti. Te recomendamos una marca positiva.
La paternidad no llegó el día del nacimiento, normalmente las parejas inician un proceso de preparación previa al nacimiento, se organiza un espacio, se compran objetos necesarios y regalos para finalmente conocer al ser esperado.
Ahora quiero hablarte de otra preparación que se debe tomar en cuenta, la cual se irá reforzando por medio de los lazos y valores inculcados que le seguirán en cada etapa de desarrollo entre la niñez y adolescencia y que definirá la formación del yo o la identidad de ese niño o niña hasta convertirse en un adulto. Te estoy hablando del apego o enganche emocional que debe darse entre un padre y su criatura, un estado emocional que ya desde antes de nacer se estaba formando pero que hay que seguir cultivando por medio de cada risa, un cuento en las noches, un te quiero, los regalos sorpresas, protección en los días lluviosos y fríos, salidas al parque pero también las orientaciones y correcciones necesarias fortalecerán este vínculo padre e hijo.
Según nos dice una publicación de la revista psicológica en la INFAD y su artículo “Apego al Padre y la Salud Escolar”, el padre es clave en la familia y en el desarrollo de los niños; es una figura de apoyo y seguridad, que permite adquirir mayor autonomía e independencia en los hijos.
En los tiempos actuales es muy común el ver a los padres involucrados en la crianza de los hijos, un rol que era dejado por lo general a las madres pero que hoy es entendido como responsabilidad de ambos progenitores.
Para lograr hijos con emociones estables recomendamos seguir ciertos pasos generales:
- Estar comprometido y presente desde la concepción hasta cada etapa del crecimiento del niño. Esto les dará un aprendizaje sobre el rol del padre, que no solo es un proveedor como se creía, sino que en su vida y desarrollo tiene una presencia activa otorgando seguridad y mostrando ser un adulto funcional en los diferentes escenarios sociales que en lo adelante al propio niño le tocará enfrentar.
- Atender su propia salud mental para que su relación paternal con el niño sea la adecuada.
- Disciplina positiva. El padre debe tener en cuenta que los hijos son esponjas que van absorbiendo, por lo que la manera en que usa la comunicación, el amor, el entendimiento y la empatía, mostrada en su contexto será notable en el niño y su relación con sus iguales debido a la influencia del padre en su vida.
- Paternidad activa y consciente. Te permite no solo estar pendiente de las necesidades de tu hijo sino que trabajarás para que tanto él como sus iguales disfruten del privilegio del bienestar de un mundo que está siendo cuidado y a su vez aprendan hacer lo mismo.
Aquí tienes un breve significado del origen del día de los padres.
Dicha celebración del día del padre se remonta a 1910, cuando Sonora Smart Dodd, ciudadana estadounidense, quiso impulsar un reconocimiento a los padres para homenajear al suyo: Henry Jackson Smart, quien la crió a ella y a sus cinco hermanos luego de la muerte de su madre.
Hoy quiero invitar a cada lector a reflexionar sobre el rol paterno y a celebrar el día de los padres reconociendo y valorando la figura paterna en sus vidas. Posiblemente no haya sido una paternidad de las que se venden como ideal, pero, si ves la figura del ser y no sus posibles carencias, encontrarás mucho de tu padre en tí y riquezas que realzar.
Tú que eres padre, te invito a que hagas una valoración de los aportes a tus hijos y si aún están pequeños, aprovechar el tiempo de darle una paternidad efectiva y un sano estado mental, y si ya están grandes puedes enmendar lo que consideres que no hiciste del todo de la manera adecuada, acercarte y mejorarlo.
Si sanas tu relación con tus hijos, las generaciones siguientes te lo agradecerán.