Santo Domingo, República Dominicana. El Banco Central de la República Dominicana (BCRD) informó que, durante el período enero-noviembre de 2024, las remesas familiares recibidas ascendieron a US$9,752.5 millones, registrando un incremento interanual de US$540.3 millones (5.9 %) respecto al mismo período de 2023. En noviembre, las remesas sumaron US$840.8 millones, lo que representó un aumento del 6.7 % en comparación con el mismo mes del año pasado.
El BCRD destacó que estas cifras reafirman la importancia de los flujos de remesas enviados por la diáspora dominicana, los cuales tienen un impacto significativo en el consumo, la inversión y el financiamiento de los sectores más vulnerables del país. Además, se proyecta que las remesas cerrarán el año 2024 en torno a los US$10,700 millones, superando las expectativas previas.
El desempeño económico de Estados Unidos, país de origen del 83.1 % de las remesas en noviembre (equivalente a US$652.1 millones), fue determinante para el crecimiento de estos flujos. Durante ese mes, el mercado laboral estadounidense registró una tasa de desempleo de 4.2 %, con la creación de 227,000 nuevos empleos, y el sector servicios, donde labora una gran parte de la diáspora dominicana, mantuvo su expansión según el índice PMI del Instituto de Gerencia y Abastecimiento.
Otros países que contribuyeron significativamente a las remesas incluyen España (US$45.8 millones o el 5.8 % del total), Italia (1.3 %), Haití (1.1 %), Suiza, Canadá y Panamá.
El Distrito Nacional continuó liderando como la principal receptora de remesas en noviembre, con una participación del 41.1 %, seguido por las provincias de Santiago (12.3 %) y Santo Domingo (7.6 %). En conjunto, estas tres áreas metropolitanas concentraron el 61.0 % de los flujos recibidos, la provincia Duarte captó un 4.5% reflejando el dinamismo económico y el peso demográfico de estas zonas.
El BCRD prevé que el flujo total de divisas al cierre de 2024 superará los US$43,000 millones, destacándose los ingresos del turismo, con un monto estimado similar al de las remesas (US$10,700 millones). Asimismo, se espera que las exportaciones de zonas francas sobrepasen los US$8,500 millones, mientras que los flujos de inversión extranjera directa (IED) se situarán por encima de los US$4,500 millones. Estos ingresos han contribuido a mantener la estabilidad relativa del tipo de cambio, con una depreciación acumulada de apenas 3.7 % hasta noviembre de 2024.
La estabilidad en los ingresos externos permitió al país alcanzar un nivel de reservas internacionales de US$13,090.4 millones al cierre de noviembre, equivalente a unos 5 meses de importaciones y un 10.5 % del PIB, superando los estándares recomendados por el Fondo Monetario Internacional (FMI).