Nací un día 15 de Mayo en la década de los años 50, mi alumbramiento se produjo en el Hospital San Vicente de Paúl y al cumplirse más de 50 años de ese acontecimiento memorable, el mismo sitio donde nací siguen cuestionándole sus servicios prestados a la comunidad como el primer día cuando el presidente Horacio Vásquez lo construyó en madera en 1927.
Desde el 20 de diciembre del año 1962 cuando se celebraron las primeras elecciones después de la muerte de Trujillo es observado y he participado en casi todos los procesos eleccionarios, en todo he escuchado decir que en éste sí que se juega el destino del país, que la democracia coge peligro como si ésta en alguna época hubiese existido y que el progreso se detendrá como si el pueblo dominicano en alguna época hubiese adquirido algún progreso, siempre se ha alegado que el país corre peligro si sucede tal o cual cosa, hasta se llegó a decir que José Francisco Peña Gómez no representaba la nacionalidad dominicana y que por el contrario éste simbolizaba el camino malo. Balaguer llegó a decir en varias ocasiones que sólo él garantizaba la llegada del barco a puerto seguro, al profesor Juan Bosch se le acusó de comunista y de que éste no creía en Dios, sin embargo, créame que me estoy excediendo mucho en esta introducción, porque lo que quiero decirle es que el hospital en donde nací sigue prestando servicio tan pobre como antes, que la vida vale menos que antes, que el sistema eléctrico es tan pobre como antes, agréguele que en los últimos 8 años no se le ha agregado al sistema ningún megavatio, que el desempleo ha aumentado, aquí por el contrario quebraron las zonas francas, que los servicios básicos son tan pobres y malos como antes, que de cada 100,000 habitantes 27 son asesinados en las calles de Santo Domingo, ésta misma semana un joven Oficial de apenas 23 años de edad y graduado en arquitectura fue asesinado en Santo Domingo, un ex Capitán de la Fuerza Aérea conjuntamente con su esposa e hijo también fueron asesinados en el mismo lugar y aquí en San Francisco de Macorís otro Oficial retirado fue asesinado por bandas delincuenciales. Que mientras un simple empleado banquero gana 2 millones de pesos mensuales un agente policial sólo gana 3,000 pesos mensual.
Que después de más de 50 años de haberse producido mi nacimiento el país vive momentos dramáticos: hipotecado con la banca internacional por una deuda que sobrepasa los 23,500 millones de dólares y por lo cual le pagamos más del 52% del presupuesto nacional sólo en amortizaciones, intereses y comisiones.
Que después de haber nacido, nunca en mi vida había visto un gobierno tan malo, indolente y farsante como el actual, que no había visto un gobierno que a la luz de los ojos permita que cualquier funcionario por el simple hecho de ser amigo del presidente se pueda robar un país entero y que todo siga como que todo va bien y que a pesar de todo, nunca como ahora la población había descendido a un nivel de inmoralidad tan denigrante y hasta mujeres exhibiendo grandes tatuajes son la atracción del Partido que fundó Juan Bosch. Que el consumo de drogas haya llegado tan lejos como los puntos de venta que de acuerdo a las palabras del propio presidente éstos suman 30,000, que nunca en mi vida había conocido personas desde el punto de vista humano tan malos como son los que dirigen aquí el partido oficial, capaces de permitir que se dañen raciones de alimentos por no dársela a la población, que no había visto un presidente solo actuar y fortalecer instituciones a favor de él y de su Partido, hacer una Constitución a su manera, autorizar que su esposa por tener sólo esa categoría y nada más, uso de un presupuesto nacional más de 600 millones de pesos para que comprar lujos y sólo lujos, y sólo lujos, y sólo lujos, que después de haber nacido hace más de 50 años una dirección de un Hospital Regional Universitario se de el lujo de recibir un aparato moderno de Radiología y tres años después no lo hayan instalado por falta de dinero y que al mismo tiempo el candidato del gobierno gaste de 20 millones de pesos en una campaña en el mismo frente del Hospital, que un hombre que gobierne un país por 12 años y en la provincia que fue bautizada con el apellido del fundador de la República en el año de 1926 no haya comprado ni una cuerda de una guitarra ni mucho menos, haya construido el lugar donde aprender a tocarla y para los deportistas, ni en un sabana haya construido un play, que después de haber nacido hace más de 50 años, mi país se hunde en la miseria y el presidente en tono de burla diga que: “eh pa´lante que vamos” , pues entonces por todo lo que he expresado y por lo que diré después del 20 de mayo, hago aquí una parada para pedirle al pueblo dominicano que llegó el momento de hacer cambiar éste estado de cosa en la que están sumergidas la mayor parte del pueblo dominicano y que no vacilemos en cambiar este gobierno que se ha convertido en una pesadilla para toda la población y le recuerdo otra vez que después de mi nacimiento un 15 de mayo de los años 50, nunca como ahora se hace tan necesario e imprescindible que tú pueblo te pongas de pie y grite a los 4 puntos cardinales: “llegó papá, votemos por papá, ganó papá, y vuelva y grite los gánsteres se van y se van para siempre, y que como este artículo es el último que publicaré antes del 20 de mayo, quiero advertirles que esta vez, si es verdad que sobre el territorio dominicano se aproximan nubarrones que pueden ensombrecer el país para siempre sin posibilidad de volver la luz sobre él y yo termino diciendo que: “devuelvan las papeletas o en cambio tendrán que coger las patinetas”.
Autor: Dr. ISIDRO MARTÍNEZ UREÑA (ABOGADO NOTARIO, EX FISCAL, PRESIDENTE PROVINCIAL DEL PDI EN PROVINCIA DUARTE)
a pintura azul con la inscripción: «Dominicanos y haitianos unificados en una sola Nación», y terminaba con las siglas MPP, presumo que el hombre del grupo u organización responsable, lo que para mi tiene una lectura y metamensaje fácil de descifrar, ¡Integración!, proyecto en su fase terminal de consumación, que no podemos subestimar ni ser indiferentes.
Aún más reciente un Obispo que representa a la Pastoral Haitiana en el país, en declaraciones a los medios exigió a las autoridades de la Junta Central Electoral otorgar indiscriminadamente actas de nacimientos y cédulas a haitianos indocumentados, al mismo tiempo sostuvo que las fronteras deben desaparecer, lo que constituye un acto de complicidad que para mí no es la posición de la iglesia dominicana, sino de uno de sus miembros.
Para los que no tienen cerebros y califican de estúpidos, dados como pasatiempo a juzgar y adjudicar a los verdaderos dominicanos el aberrante título de «racistas», no tendría por qué dar ninguna explicación o satisfacción, no obstante puedo afirmar sin hipocresía, que mi conciencia está libre de todo sentimiento racista y antihaitianismo, puede y lo más probable que haya uno que otro dominicano que lo sea, pero no así la mayoría, y es que como dice un viejo refrán popular, «el dominicano tiene el negro detrás de la oreja», como las islas del Caribe y países latinoamericanos.
Si el pueblo dominicano fuera racista no hubiera la integración y convivencia de inmigrantes de islas posesiones inglesas conocidos por el nombre de cocolos, nada denigrante, y que se insertaron en la sociedad dominicana sin ningún problema, formando parte de ella, con niveles de educación y cultura muy superior a los de nuestros vecinos, que han sobresalido en diferentes facetas, sobre todo el arte y la cultura, en igualitarias oportunidades que los dominicanos.
No estoy contra los haitianos, merecen por derecho y dignidad un mejor trato humano, superar los niveles de extrema pobreza, analfabetismo, exclusión y marginalidad social, condiciones degradantes a las que los han llevado las potencias que intervinieron y su misma clase política, hipócritas, irresponsables y corrompidas, únicas culpables de su desgracia.
Pienso como dominicano y ser humano que los haitianos y dominicanos no podemos ser enemigos como quisieran y alentaran nuestros enemigos comunes, pero cada país ocupando su espacio vital en la isla, en un marco definido de respeto y mutua colaboración, nunca de intromisión y conflictos que puedan reeditar los sangrientos acontecimientos del pasado, con diferencias culturales que no deben ser escollos en las relaciones de amistad y vecindad de ambos pueblos.
El autor es Abogado, Locutor, Periodista y Escritor
Luisnazario28@hotmail.com
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