Dormir es, más que un placer, una necesidad que beneficia nuestra salud en general, lo que, a su vez, favorece el rendimiento físico y laboral. De aquí parte la importancia de yacer de manera profunda y cómoda durante un lapso de seis a nueve horas diarias.
En la conducta, la falta de sueño provoca irritaciones, litigio, ansiedad y/o pesadez. En la salud: enfermedades cardiovasculares, endocrinas y siquiátricas. Mientras que en el ámbito laboral puede causar problemas de concentración, falta de productividad, errores y hasta accidentes que tengan como consecuencia la muerte, así lo plantea el libro “Medicina del sueño: enfoque multidisciplinario”.
Luis Felipe Encarnación, otorrinolaringólogo y especialista en Medicina del Sueño, explica que para que un empleado pueda hacer un trabajo con seguridad, destreza y eficiencia, es necesario que esté en alerta, algo que se logra descansando lo necesario por medio del sueño.
Dice que en la actualidad son más los trabajos por turnos, aunque, a su juicio, son muy ventajosos con respecto a la producción, también pueden provocar alteraciones en el sueño y somnolencia excesiva que, a su vez, aumentan la probabilidad de tener ausentismo, accidentes, errores, heridas e incluso pérdida de la vida.
Lamenta que no haya tratamiento médico para estos trastornos. Una pastilla o una taza de café no sustituyen una buena noche de sueño o una siesta de calidad. Algunos estudios sugieren que el cuerpo nunca se adapta por completo al trabajo por turnos, especialmente aquellos que cambian a un horario normal en los fines de semana.
Según Encarnación, el sueño debe ser adecuado en cantidad, calidad y de oportunidad. En cantidad porque dormir menos de seis horas o más de nueve es igualmente perjudicial; en calidad, porque cómo se duerme y el tipo de colchón donde se duerme influye en el descanso. Respetar la oportunidad de dormir es muy importante, porque es el momento real en que el cuerpo lo necesita.
El doctor explica que el cuerpo tiene el Ritmo Circadiano o ritmos biológicos que ocurren en ciertos momentos con diferentes necesidades. Coinciden con la liberación de sustancias y hormonas como el cotizol y la melatonina que suben y bajan según las horas del día, cuando la melatonina está más alta la persona tiene más posibilidad de dormir, mientras que cuando baja y sube el cortizol el individuo está más despierto y apto para realizar cualquier tipo de labor física. De aquí parte la importancia de una rutina del sueño, pues el cuerpo se adapta a la cultura que se ha sometido.
Rutinas para un mejor sueño
Para conciliar el sueño que permita el descanso, Luis Encarnación dice que hay que llevar una vida saludable y tener una higiene del sueño: no tome bebidas cafeinadas previo a dormir, haga ejercicios físicos en el día, tenga ambiente adecuado respecto a la cama.
MANTENERSE ALERTA EN LA JORNADA DE TRABAJO
El 14 de marzo se celebra el Día Mundial del Sueño, razón por la que la Academia Dominicana de Medicina del Sueño realiza charlas para concienciar a la sociedad médica acerca de sus beneficios.
Luis Felipe Encarnación, especialista del sueño, en su misión de orientar a la población acerca de los problemas que surgen a partir de la falta de un descanso verdadero que ayude al desarrollo eficiente laboral, da algunas recomendaciones: Evite las horas extras, tome siestas cortas durante el turno y trabaje en equipo para mantenerse despierto.
También es importante no dejar las labores más tediosas o aburridas, a su criterio, para el final de la jornada, cuando estará más cansado. Mantenerse activo en los descansos, hacer ejercicios, e identificar cuándo se está somnoliento para evitar un accidente laboral.