Tal y como se había anunciado con tanta insistencia en los más importantes medios de comunicación, el ex Presidente de la República, ingeniero Hipólito Mejía se dirigió al país, dejando abiertas las puertas para una posible candidatura presidencial para las elecciones nacionales del año 2016.
El ex gobernante dijo muchas verdades sobre el tétrico panorama económico y social que vive el país, pero metió la pata de manera muy vulgar al expresar que esta de acuerdo con la explotación de Loma Miranda, uniéndose al coro que dirige el diputado peledeista licenciado Juan Comprés, quien de manera descabellada y burda dijo que no se hace nada con tener minas de oro si no son explotadas.
Solo al Diputado del Partido de la Liberación Dominicana y al ingeniero Hipólito Mejía se le puede perdonar tal planteamiento sobre Loma Miranda, razón de que al parecer sufren de trastornos mentales, que merecen ser tratados por médicos especialistas en el plano nacional e internacional.
No están equivocados los francomacorisanos que en mayoría entienden que alrededor de Hipólito Mejía volvió a soltarse el loco, tal y como lo hizo en la pasada campaña electoral, garantizando de manera festiva y asombrosa el triunfo del licenciado Danilo Medina.
Dicen nuestros antepasados que cuando se llega a viejos con determinados nivel de dislocación, mañas y malas costumbres, difícilmente pueden ser superadas, mucho menos personas que ya besan o acarician los minutos finales de su existencia terrenal.
Sin ningún titubeos inscribimos en ese grupo al ingeniero Hipólito Mejía, porque en verdad y que lo sepan los Ángeles de Cielo y los 12 Apósteles que cenaron alrededor de Jesús, ese señor no merece nuestro respeto y admiración por ser un peligro público para la soberanía nacional hasta que se pruebe lo contrario.