Los libaneses Abraham Abukarma e Isaac Kaluche, comerciantes radicados en San Francisco de Macorís, a partir de 1938 introdujeron en San Francisco de Macorís la cultura de consumir vinos y frutas durante la temporada navideña y establecieron el crédito comercial para sus clientes de la zona rural.
Abukarma y Kaluche aunque habían llegado al país en 1914 volvieron a Estados Unidos donde permanecieron más de 10 años. A su regreso se establecieron en esta ciudad de San Francisco de Macorís dedicándose a las actividades comerciales de compra de frutos menores, importación y venta de mercancías tanto desde sus negocios como llevándolo en burros, caballos o mulos a la zona rural.
Para los clientes de la zona rural crearon la costumbre de fiarle los productos y los cobraban la próxima vez que le visitaran para surtirle.
Respecto a los productos navideños, los hermanos licenciado Abraham y el Ing. Pablo Abukarma, hijos de don Abraham, expresan que vinos del Rioja, las frutas secas como avellana, coquito y almendras, las frutas dulces como uva, manzanas, peras y otras comenzaron a conocerse en esta ciudad a partir de las importaciones que desde 1938 iniciaron Abukarma y Kaluche quienes eran socios en los negocios. Igualmente en los primeros años de la década del 40 obtuvieron los derechos de distribución exclusiva de la sal, condimento que les llegaba desde Puerto Plata.
Para entonces el transporte de mercancías hacia las comunidades rurales y entre regiones se realizaba a lomo de animales por lo que en cualquier parte de la ciudad y sobre todo en las proximidades de las tiendas, ferreterías y demás negocios habían argollas incrustadas en las paredes para amarrarlos.